Noticias SACSIS
La actualidad de nuestra entidad y las últimas novedades en financiación a la I+D+I.
La actualidad de nuestra entidad y las últimas novedades en financiación a la I+D+I.
La Unión Europea ha situado la inteligencia artificial generativa (GenAI) en el núcleo de su agenda de I+D biomédica para el periodo 2025‑2026, combinando amplias convocatorias de Horizon Europe con iniciativas específicas como GenAI4EU y nuevos instrumentos en EU4Health. Para centros de investigación, hospitales, grupos clínicos y empresas deep‑tech en el ámbito de la salud, el año 2026 será fundamental para consolidar proyectos que aprovechen datos multimodales, gemelos virtuales y asistentes clínicos generativos bajo normativas como el AI Act y el Espacio Europeo de Datos Sanitarios (EHDS).
GenAI4EU representa la iniciativa transversal de la CE destinada a promover aplicaciones de inteligencia artificial generativa en los principales ecosistemas industriales, con un enfoque muy marcado en salud y biomedicina. Su estrategia se dirige a casos de uso con impacto tangible, que sean integrables en procesos de investigación, ensayos clínicos y sistemas de salud.
El paquete financiero relacionado (que asciende a cientos de millones de euros durante el periodo) se canaliza principalmente a través de Horizon Europe (Pilar II y EIC), con acciones complementarias en Europa Digital y EU4Health. En el campo de la biomedicina, GenAI4EU financia desde modelos generativos entrenados con datos multimodales hasta asistentes clínicos avanzados, siempre bajo principios de fiabilidad, explicabilidad, trazabilidad y cumplimiento normativo.
El mensaje político es claro: Europa aspira a liderar la GenAI biomédica desde la ciencia abierta, la protección de datos y la confianza pública, no a través de modelos opacos o soluciones desconectadas de la realidad clínica.
El Clúster 1 “Health” de Horizon Europe introduce en su Programa de Trabajo 2025 un apartado explícito dedicado a la IA generativa aplicada a la investigación biomédica y la atención sanitaria. Es la primera vez que la GenAI se presenta como eje central y no como una tecnología secundaria transversal.
Las prioridades científicas se estructuran en torno a:
Aunque las convocatorias clave cerraron en septiembre de 2025, los proyectos seleccionados se desarrollarán mayoritariamente entre 2026 y 2030, lo que convierte a 2026 en el año de implementación efectiva de plataformas, infraestructuras de datos y modelos fundacionales que definirán la agenda biomédica europea de la próxima década.

La lógica de EU4Health complementa a Horizon Europe: donde Horizon financia ciencia y tecnología emergente, EU4H promueve la adopción en los sistemas sanitarios y políticas de salud pública, con un énfasis en equidad, eficiencia y confianza en la IA. Para 2026, esto implica que proyectos GenAI4EU enfocados en cardiometabolismo, imagen o medicina preventiva pueden encontrar en EU4H un marco ideal para escalar, integrar a autoridades sanitarias y consolidar cambios organizativos.
La implementación responsable de la IA generativa biomédica requiere de entornos de validación técnica, clínica y regulatoria. Aquí el programa Europa Digital desempeña un papel fundamental, especialmente a través de los Testing and Experimentation Facilities (TEF) en salud.
Infraestructuras como TEF-Health proporcionan entornos realistas para evaluar soluciones de IA y robótica sanitaria, incluyendo modelos generativos que pueden considerarse software como dispositivo médico. En 2026, muchos consorcios financiados por Horizon y EU4Health utilizarán estos bancos de pruebas para validar la seguridad, robustez y cumplimiento normativo antes de su implementación a gran escala.
Los documentos programáticos europeos señalan áreas prioritarias donde la GenAI puede generar un avance significativo:
En todos los casos, la Comisión enfatiza la necesidad de gobernanza de datos, control de sesgos, explicabilidad y alineamiento con el AI Act y el EHDS como condiciones innegociables.
Aunque muchas convocatorias estratégicas finalizan en 2025, 2026 es el año en el que la financiación se transforma en ejecución y oportunidades reales. Existen diversas vías para posicionarse:
Si deseas estar al tanto de las últimas oportunidades de financiación para tu investigación o innovación, síguenos.
Entre 2025 y 2027, la Unión Europea ha establecido un marco específico de apoyo para que las pequeñas y medianas empresas fortalezcan su seguridad digital, implementen tecnologías avanzadas y se ajusten a un entorno regulatorio cada vez más riguroso. Para muchas pymes, este respaldo europeo facilita la transformación mediante asistencia técnica y financiera.
La implementación gradual de la Directiva NIS2 y del Cyber Resilience Act incrementa notablemente las responsabilidades de seguridad para un gran número de empresas. Sectores que anteriormente estaban excluidos de estas exigencias ahora deben demostrar medidas concretas de gestión de riesgos, respuesta a incidentes y seguridad de productos. Esta presión normativa impacta directamente a las pymes, que en muchos casos no cuentan con equipos internos especializados o con el presupuesto necesario para implementar soluciones avanzadas por su cuenta.
Consciente de esta brecha, la CE ha vinculado parte de la financiación digital del periodo 2025–2027 a facilitar la adaptación de las pymes. El objetivo es mejorar la resiliencia del tejido empresarial europeo ante amenazas cada vez más sofisticadas y automatizadas.
El Digital Europe Programme (DEP) se ha convertido en el principal instrumento para llevar capacidades de ciberseguridad al mercado. En el ámbito específico de la seguridad digital, el programa destina aproximadamente 390 millones de euros para el periodo 2025–2027, con una gestión muy relacionada con el European Cybersecurity Competence Centre (ECCC).
Este enfoque combina financiación para la implementación de soluciones ya consolidadas, acciones de capacitación y apoyo directo al cumplimiento regulatorio. A diferencia de otros programas centrados en la investigación, aquí el énfasis está en la adopción real de herramientas y servicios, situando a las pymes tanto como usuarias finales de soluciones subvencionadas como participantes activas en consorcios tecnológicos.
El programa de trabajo de ciberseguridad bajo Digital Europe incluye varias acciones donde las pymes tienen un papel explícito. Una de las más destacadas es la orientada a la adopción de soluciones innovadoras de ciberseguridad para pymes, con convocatorias previstas desde finales de 2025 y cierres en el primer trimestre de 2026. Estas acciones financian la implementación de plataformas, servicios gestionados, herramientas de monitorización y formación específica, con tasas de cofinanciación más favorables para las empresas de menor tamaño.
Junto a esta línea, el programa promueve proyectos basados en inteligencia artificial aplicada a la ciberseguridad, desde la detección automatizada de amenazas hasta la gestión de vulnerabilidades y la protección de datos. En estos casos, las pymes pueden participar tanto como desarrolladoras de soluciones deep tech como usuarias piloto en sectores específicos.
Otra área destacada es el fortalecimiento de capacidades a través de hubs nacionales y transfronterizos de ciberseguridad. Estos hubs ofrecen servicios compartidos, como centros de operaciones de seguridad, intercambio de inteligencia sobre amenazas o apoyo en la respuesta a incidentes. Para las pymes, esto se traduce en acceso a servicios avanzados que, de otro modo, serían difíciles de asumir de forma individual.
Aunque el Digital Europe Programme se centra en la implementación, Horizon Europe sigue teniendo un papel importante en el desarrollo de nuevas tecnologías de ciberseguridad. A través del Clúster 3, dedicado a la seguridad civil, se financian proyectos de investigación e innovación que integran a pymes en el diseño, validación y demostración de soluciones avanzadas.
Estas acciones priorizan herramientas modulares, integrables y alineadas con principios como la privacidad desde el diseño y la interoperabilidad con infraestructuras europeas de datos. Para las pymes tecnológicas, Horizon Europe representa una oportunidad para desarrollar productos de próxima generación que posteriormente pueden escalarse y desplegarse mediante otros instrumentos europeos.
Más allá de los grandes programas, la Unión Europea ha promovido proyectos que actúan como intermediarios y redistribuyen fondos o servicios a pymes mediante convocatorias abiertas. Estas iniciativas ofrecen subfinanciación, bonos de servicios o itinerarios completos de evaluación y mejora de la postura de ciberseguridad empresarial.
En la práctica, esto permite a muchas pymes acceder a evaluaciones técnicas, escaneos de seguridad, formación especializada o incluso financiación directa sin necesidad de liderar un gran consorcio europeo. Para 2026 se anticipa la continuidad de este tipo de esquemas, con nuevas convocatorias abiertas que faciliten
El EIC Accelerator se adentra en 2026 con modificaciones que impactan directamente en la manera en que las empresas deben organizar su estrategia tecnológica, financiera y de crecimiento. Aunque la esencia del programa permanece: tecnologías de deep tech, alto riesgo y potencial transformador, los cambios implementados en el Work Programme 2026 requieren una preparación más rigurosa y coordinada a nivel técnico, empresarial y de inversión: simplificación del proceso e integración de la due diligence en una fase temprana del proceso.
La CE ha confirmado que el presupuesto total se situará en torno a 630–640 millones de euros, con una distribución que refuerza la modalidad Open y mantiene los Challenges en un conjunto muy restringido de prioridades estratégicas vinculadas a la autonomía tecnológica y la transición verde. Para muchas empresas, esto significa redefinir la narrativa del proyecto y evaluar cuidadosamente la adecuación a las nuevas dinámicas de evaluación.
Uno de los cambios más significativos es el aumento del peso del EIC Accelerator Open, que absorbe una mayor proporción del presupuesto total, en comparación con el EIC Accelerator Challenges, que tendrá una asignación de 220-250 millones de euros. Estos desafíos se centran en áreas muy específicas: materiales avanzados para energías renovables y almacenamiento, tecnologías disruptivas para fusión, biotecnología aplicada a suelos agrícolas, fortalecimiento de cadenas de valor en materias primas críticas y deep tech para adaptación climática.
El proceso de evaluación avanza hacia un formato más ágil. Los formularios del full proposal serán más breves y permitirán reutilizar parte del contenido presentado en el short application. Además, se introduce una due diligence en la fase de solicitud, previa al jurado, que revisará de manera anticipada el nivel de TRL, la propiedad intelectual, la coherencia del plan de mitigación de riesgos y la justificación técnica del escalado.
Simultáneamente, la calendarización de cortes (batching) será más regular, lo que beneficia a las empresas que planean su presentación dentro de una estrategia financiera más amplia.
Las modificaciones del EIC Accelerator 2026 responden a una combinación de prioridades políticas europeas: autonomía estratégica, transición verde y competitividad en deep tech frente a Estados Unidos y Asia. Por lo tanto, se espera que las empresas demuestren una tecnología disruptiva y una capacidad real para contribuir a cadenas de valor críticas para Europa.
Para las empresas, esto implica contar con una tecnología lo suficientemente robusta, un plan de negocio creíble y un modelo de escalado coherente con el mercado europeo. Debe quedar claro por qué la innovación propuesta refuerza la posición de Europa en áreas como almacenamiento energético, materias primas críticas, bioeconomía o energías limpias.
La diferenciación entre las dos modalidades se vuelve crucial:
Un error común es “forzar” artificialmente la adecuación a un Challenge. La recomendación para 2026 es clara: si la propuesta no responde de manera inequívoca al topic, la ruta más sólida es el Open.
El Accelerator sigue enfocado en startups y pymes en fases de validación, demostración e industrialización, con tecnologías entre TRL 5–6 y TRL 8–9. Para 2026, las empresas deberán: presentar pilotos sólidos con datos verificables, aportar un plan claro de industrialización y demostrar que el acceso al mercado puede lograrse en un horizonte de dos a tres años.
Los evaluadores prestan especial atención al equipo. Se espera una combinación equilibrada de capacidades técnicas y empresariales, con perfiles experimentados en escalado industrial o sectores regulados.
Una estructura de gobernanza profesional, un pacto de socios claro y una distribución accionarial estable son elementos que pueden diferenciarte en fases de jurado. Para empresas muy enfocadas en la tecnología, 2025–2026 es el momento de incorporar perfiles comerciales, regulatorios o de desarrollo industrial.
El esquema de financiación combinada seguirá siendo el formato principal: hasta 2,5 millones de euros en subvención, más equity generalmente entre 0,5 y 10 millones de euros gestionados por el EIC Fund. Las modalidades grant only y equity only continuarán existiendo, pero serán excepcionales.
Para estar preparadas, las empresas deberán:
Los nuevos formularios de 2026, más concisos, obligan a priorizar datos, análisis y lógica de negocio. La narrativa debe centrarse en los hitos técnicos, el mercado objetivo, los riesgos y la estrategia de escalado.
La due diligence técnica anticipada obliga a preparar con antelación la documentación de patentes y acuerdos de propiedad intelectual. También se deberán elaborar los informes de ensayo, certificaciones y resultados de validación. Además, resaltar el análisis de mercado y métricas financieras (TAM/SAM/SOM, unit economics preliminares), y por último, tener en cuenta los riesgos tecnológicos con planes de mitigación detallados.
Para aquellos que opten por los retos, la adecuación tecnológica debe traducirse en resultados verificables. Por ejemplo:
El EIC está fortaleciendo su lógica de portafolio, combinando fases desde Pathfinder y Transition hasta STEP Scale Up. Las empresas provenientes de estos programas disponen de vías aceleradas hacia el Accelerator.
El instrumento STEP Scale Up, orientado a rondas de inversión más elevadas, cobra mayor relevancia para empresas deep tech que buscan escalar rápidamente en sectores como energía, biotecnología o digital.
El EIC Accelerator 2026 conserva el mismo ADN (deep tech, alto riesgo, alto impacto), pero llega con ajustes clave: mayor peso del Open, desafíos muy centrados en la transición verde/estratégica y un proceso de evaluación más ágil y exigente. Preparar tu empresa para 2026 implica alinear tecnología, modelo de negocio, equipo e inversión con este nuevo contexto, no solo “elaborar una buena propuesta”. Si buscas a alguien que te asesore, consúltanos ahora. Es el momento.
El crecimiento de la Open Science en Europa ha transformado la forma en que se comparten, analizan y reutilizan los datos de investigación. En este marco, la gestión de datos sensibles se ha vuelto un aspecto fundamental para aquellos que manejan información personal, clínica, socioeconómica o empresarial. La necesidad de encontrar un equilibrio entre la apertura, la reproducibilidad y la protección de derechos fundamentales se ha intensificado con la implementación del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y las exigencias de programas como Horizon Europe. Este marco exige el diseño de proyectos que aseguren transparencia y reutilización, sin comprometer la privacidad ni la seguridad jurídica.
En Open Science, se consideran sensibles los datos personales (especialmente los relacionados con la salud, genómicos o que involucran a grupos vulnerables) y aquellos cuyo uso inapropiado podría resultar en discriminación, daño a la reputación o pérdidas económicas. También se incluyen datos confidenciales de empresas y organismos públicos, así como información estratégica sujeta a acuerdos de confidencialidad.
El paradigma europeo actual no promueve una apertura sin límites. La tendencia predominante, adoptada por Horizon Europe y diversas agencias de financiación, es “tan abierto como sea posible, tan cerrado como sea necesario”. Esto significa publicar metadatos abiertos siempre que sea posible, proporcionar información derivada o agregada y, cuando el riesgo lo requiera, permitir acceso controlado a través de comités de revisión o acuerdos específicos. Así, incluso cuando los datos no puedan hacerse públicos, pueden seguir siendo FAIR si están correctamente descritos y accesibles bajo condiciones claras.
El RGPD establece las condiciones legales para el tratamiento de datos personales, incluyendo bases legítimas de tratamiento, minimización, seudonimización, anonimización y evaluaciones de impacto en protección de datos cuando hay un riesgo significativo. Las legislaciones nacionales y las directrices institucionales complementan estas obligaciones con requisitos éticos adicionales.
Los principios FAIR —que exigen que los datos sean localizables, accesibles, interoperables y reutilizables— no obligan a una apertura total. Permiten que conjuntos de datos sensibles estén disponibles a través de procedimientos de solicitud, repositorios con control de acceso o entornos seguros. Esto facilita que la comunidad investigadora cumpla con los mandatos de transparencia sin infringir el marco legal.

Uno de los principales retos es el riesgo de re-identificación. A pesar de que se eliminen identificadores directos, la combinación de variables puede permitir inferir la identidad de los participantes, especialmente en muestras pequeñas o en investigaciones con grupos específicos.
La tensión entre reproducibilidad y confidencialidad también genera dilemas prácticos. Las revistas científicas y financiadores exigen acceso a datos y código, mientras que las oficinas de protección de datos y los comités éticos solicitan restricciones más severas. Esta dualidad puede llevar a decisiones apresuradas: desde publicar datos insuficientemente anonimizados hasta cerrar completamente el acceso, limitando el valor científico del trabajo.
Además, se presentan la falta de formación especializada, la complejidad de redactar consentimientos informados que consideren la reutilización futura y la fragmentación de infraestructuras seguras entre países e instituciones.
La gestión de datos sensibles debe ser planificada desde el principio. Los Data Management Plans (DMP), requeridos por Horizon Europe, permiten identificar qué datos se generarán, qué nivel de sensibilidad tendrán y qué condiciones se aplicarán para su acceso, almacenamiento y reutilización.
Los DMP más sólidos reflejan:
Las técnicas avanzadas de anonimización incluyen la agregación de variables, la generalización de categorías o la perturbación estadística. En proyectos con datos especialmente sensibles, pueden emplearse métodos como la privacidad diferencial, aunque su uso requiere experiencia técnica.
La seudonimización —sustituir identificadores por códigos— sigue estando bajo el RGPD, ya que permite revertir el proceso si existe una clave. Por esta razón, suele utilizarse para análisis internos o entornos de acceso restringido. En el contexto de open science, es común combinar conjuntos de datos anonimizados de manera robusta para compartir abiertamente, dejando la versión seudonimizada en repositorios con acceso controlado.
Uno de los avances más significativos en Europa es la consolidación de los Trusted Research Environments (TRE), que se están integrando progresivamente en la European Open Science Cloud (EOSC). Estos entornos permiten analizar datos sensibles sin necesidad de transferirlos, aplicando un modelo de “llevar el algoritmo al dato”. Su uso se está extendiendo en proyectos europeos enfocados en datos biomédicos, observación de la Tierra o ciencias sociales.
Iniciativas como EOSC ENTRUST buscan armonizar estos entornos a nivel europeo mediante un marco común de interoperabilidad técnica y legal. A su vez, proyectos como SIESTA trabajan en herramientas para anonimización, control de acceso y análisis reproducible en la nube, facilitando que instituciones más pequeñas accedan a infraestructuras de alta seguridad.
Además de los repositorios institucionales con opciones de acceso restringido, plataformas como el Open Science Framework permiten gestionar salidas derivadas de datos sensibles siguiendo principios FAIR. Algunas instituciones ofrecen catálogos de servicios de anonimización y asesoría especializada en protección de datos, así como plantillas de DMP adaptadas específicamente a contextos de datos sensibles.
La combinación de estos recursos contribuye a cumplir tres objetivos fundamentales: protección legal, apertura razonable y un uso más amplio de los resultados de investigación.
¿Deseas obtener más información sobre la gestión de datos sensibles en Open Science? Ponte en contacto con nosotros, y te asesoramos con todo detalle.
La implicación de la ciudadanía en la investigación se ha establecido como un enfoque que mejora tanto la producción científica como su relevancia social. La ciencia ciudadana posibilita que individuos sin formación especializada colaboren en la creación de conocimiento mediante observaciones directas, análisis de datos, diseño de actividades o difusión de resultados. La innovación social, por su parte, ofrece metodologías para enfrentar desafíos públicos a través de procesos colaborativos entre académicos, administraciones, empresas y organizaciones civiles. La fusión de ambas prácticas amplía la importancia de la ciencia y refuerza su influencia en políticas y comunidades.
La interrelación entre ciencia ciudadana e innovación social está dirigida hacia la cocreación de soluciones con un impacto concreto. La Comisión Europea ha respaldado esta perspectiva desde Horizon 2020, mediante iniciativas que fomentaron la investigación participativa bajo el programa “Science with and for Society”. En este sentido, Horizon Europe continúa apostando por metodologías abiertas, introduciendo temas donde la colaboración ciudadana es un elemento fundamental, especialmente en biodiversidad, monitoreo ambiental, salud pública o justicia social.
Estas prácticas responden a una demanda europea de ciencia más accesible, transparente y centrada en resolver problemas reales. Su implementación demuestra que la ciudadanía proporciona datos de alta calidad, identifica prioridades de investigación y ayuda a validar los resultados en contextos donde las soluciones científicas necesitan aceptación social.
La participación ciudadana amplía la escala y diversidad de los datos recopilados en un proyecto. Las observaciones distribuidas (comunes en estudios de biodiversidad, meteorología o salud ambiental) permiten abarcar áreas geográficas extensas y aumentar la frecuencia de muestreo. Además, la definición conjunta de las preguntas de investigación contribuye a orientar hipótesis más alineadas con las necesidades de las comunidades.
Otro beneficio notable es la adopción de los resultados. Cuando la ciudadanía participa desde las etapas iniciales, hay una mayor disposición a implementar las soluciones propuestas, ya sea en políticas locales, hábitos de consumo o acciones de conservación. La participación activa fortalece la alfabetización científica y mejora la percepción de la ciencia como un proceso abierto y útil.
Un proyecto con participación ciudadana requiere una planificación ética rigurosa. La gestión de datos debe asegurar la privacidad, la anonimización y la transparencia en el uso de la información recopilada. Los protocolos de consentimiento informado y la claridad sobre los derechos de propiedad intelectual son fundamentales.
La inclusión es otro pilar. Para evitar sesgos, es conveniente diseñar actividades accesibles, abordar barreras tecnológicas y lingüísticas, e incorporar medidas de igualdad de género y diversidad social. Este enfoque favorece una participación más representativa y mejora la calidad de los resultados obtenidos.

Una integración efectiva comienza en la fase de diseño del proyecto. Incluir a representantes comunitarios en las reuniones iniciales permite alinear expectativas y establecer un reparto claro de responsabilidades. Las actividades formativas son esenciales para facilitar la participación significativa de personas no expertas: guías breves, talleres prácticos y acompañamiento técnico aumentan la calidad del trabajo colaborativo.
El uso de plataformas digitales abiertas ayuda a gestionar datos, coordinar tareas y mantener la comunicación entre participantes. Además, los modelos de gobernanza compartida favorecen la transparencia y reducen fricciones organizativas. En el ámbito europeo, redes como la European Citizen Science Association facilitan buenas prácticas, herramientas y oportunidades de colaboración para nuevos proyectos o en desarrollo.
Horizon Europe continúa incorporando líneas donde la ciencia ciudadana tiene un papel destacado, especialmente en investigación ambiental, salud pública y programas experimentales de gobernanza participativa. Algunas convocatorias utilizan subvenciones en cascada, permitiendo que entidades pequeñas —incluidas asociaciones locales— accedan a financiación de manera ágil. Esta tendencia probablemente seguirá en el futuro FP10, donde se anticipa una línea específica para apoyar modelos de ciencia ciudadana y metodologías participativas.
El programa EU4Health también integra acciones de participación social en salud pública, complementando las iniciativas de Horizon Europe. A través de proyectos piloto, actividades formativas y plataformas de datos compartidos, se fomentan prácticas que permiten a comunidades locales participar en la vigilancia, prevención y respuesta sanitaria.
La innovación social añade un componente necesario para trasladar los hallazgos científicos a soluciones aplicadas. Modelos como los living labs, laboratorios urbanos o plataformas de co-diseño permiten experimentar con prototipos, medir su aceptación social y facilitar su adopción por parte de administraciones y organizaciones sociales. En áreas como movilidad sostenible, calidad del aire o gestión de recursos, estos entornos han demostrado que la colaboración entre ciudadanía y ciencia produce respuestas más ajustadas a la realidad.
Además, esta dinámica incrementa las posibilidades de replicabilidad y escalado. La innovación cocreada con usuarios se adapta mejor a diferentes territorios y presenta un menor riesgo de rechazo, aspectos especialmente valorados en convocatorias europeas que evalúan impacto y sostenibilidad.
Las tendencias actuales indican que la participación ciudadana avanzará hacia modelos más estructurados. La discusión para el próximo marco FP10 incluye la creación de líneas específicas de financiación para proyectos liderados por comunidades, así como el fortalecimiento de las plataformas digitales que permiten procesar datos voluntarios en áreas como biodiversidad, salud ambiental y ciencia abierta. Para universidades, centros de investigación y entidades públicas, esto implica mejorar capacidades internas en participación, evaluación de impacto social y coordinación de voluntariado científico.
Existen múltiples convocatorias centradas en ciencia ciudadana, una de las que se ha abierto recientemente es la Convocatoria de Ayudas 2025 “Andalucía Mejor con Ciencia” de La Fundación Descubre y la Universidad Pablo de Olavide, cofinanciada por la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación y en colaboración con la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), que seleccionará ocho proyectos en este ámbito que se desarrollarán durante 2026 y 2027.
¿Te gustaría llevar a cabo la integración de la ciudadanía en tu investigación? ¿O estás interesado en participar en una convocatoria de ciencia ciudadana o innovación social? En SACSIS diseñamos procesos participativos con rigor ético, metodológico y organizativo que permiten generar conocimiento más útil para tu proyecto. Además, te apoyamos y asistimos en la redacción de propuestas donde superamos el reto de traducir la participación en impacto medible y estrategias de co-diseño. Contáctanos.
La incorporación de tecnologías digitales y modelos de transporte sostenible en las urbes presenta oportunidades comerciales significativas para empresas tecnológicas, integradoras de sistemas, operadores de transporte y proveedores de infraestructuras. En 2025–2026 existen instrumentos públicos a diversos niveles (europeo, nacional y regional) que financian desde laboratorios urbanos y sandboxes hasta demostradores a gran escala. En este artículo proporcionamos un panorama práctico de las fuentes de financiación disponibles o previstas, los perfiles de proyecto que mejor se adaptan y recomendaciones para maximizar las posibilidades de éxito.
Las ciudades inteligentes (Smart Cities) integran sensores, gemelos digitales, plataformas de datos y herramientas de inteligencia artificial para optimizar los servicios urbanos, mientras que la movilidad sostenible prioriza modos limpios, intermodalidad y una gestión más eficiente del transporte. La estrategia europea de movilidad sostenible e inteligente define un amplio conjunto de acciones para acelerar la electrificación, la digitalización del transporte y la interoperabilidad entre modos. Estas directrices establecen las prioridades de financiación y los criterios que generalmente consideran los evaluadores: impacto en emisiones, escalabilidad, interoperabilidad y alineación con planes urbanos.
A nivel europeo, el Digital Europe Programme cuenta con fondos destinados a implementar capacidades digitales en administraciones y empresas (incluyendo IA, cloud y soluciones para gemelos digitales) con un presupuesto asignado de 1.300 millones de euros para 2025–2027. Estas líneas facilitan que soluciones tecnológicas para la gestión urbana o sistemas ITS (Intelligent Transport Systems) obtengan apoyo para su implementación y adopción pública.
En el ámbito de infraestructuras y conectividad, el Mecanismo Conectar Europa (CEF) financia proyectos transeuropeos de transporte inteligente. España recibió aproximadamente 42,1 millones de euros en la convocatoria 2024 para fomentar una red más eficiente y sostenible, lo que abre oportunidades para integradores y operadores involucrados en proyectos transfronterizos o de interoperabilidad.
El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR / NextGenerationEU) sigue canalizando inversión hacia la digitalización y descarbonización del transporte. Hasta el 30 de junio de 2025 se habían ejecutado 245,9 millones de euros en proyectos de transporte sostenible y digitalización, con un componente significativo de financiación para empresas privadas que desarrollan soluciones aplicadas.
A nivel nacional, España ha lanzado convocatorias específicas para ciudades y territorios inteligentes. El Programa de Impulso a las Ciudades y Territorios Inteligentes para el Fomento del Desarrollo Económico y Productivo, gestionado por Red.es, pone a disposición 87 millones de euros para infraestructuras tecnológicas urbanas (laboratorios urbanos, sandboxes, centros de experimentación y plataformas de ciudad) con proyectos típicamente en el rango de 1,5–6 millones de euros por iniciativa, y con requisitos orientados a la utilización de IA y gemelos digitales. Estas convocatorias están dirigidas a entidades locales y agentes que puedan gestionar demostradores en un entorno real.
Para las empresas tecnológicas, la intersección entre Digital Europe, CEF y fondos nacionales crea varias rutas posibles. Las más comunes son: i) participar como proveedor tecnológico en consorcios liderados por administraciones locales para sandboxes y living labs; ii) liderar proyectos de I+D en colaboración con centros urbanos que actúen como anfitriones de demostradores; iii) acceder a subvenciones para la implementación de soluciones digitales que mejoren la eficiencia operativa de servicios urbanos (gestión de flotas, optimización de rutas, plataforma de datos urbanos). La combinación de financiación europea y cofinanciación nacional o regional suele ser la vía más efectiva para proyectos con componente de infraestructuras.
Las empresas del sector de la movilidad pueden beneficiarse especialmente si presentan soluciones que integren baterías, recarga inteligente, electrificación de flotas y sistemas de interoperabilidad multimodal. Los proyectos que demuestren reducción de emisiones, disminución de congestión o mejoras en seguridad tienden a obtener mejores puntuaciones en las convocatorias dirigidas a transporte sostenible y transformación urbana.
Primero, alinear la solución con las prioridades del financiador: demostrar impacto climático, replicabilidad y escalabilidad. Segundo, formar consorcios con perfiles completos: administración local (anfitrión del demostrador), proveedor tecnológico, operador de transporte o energía y un centro de evaluación (universidad o centro tecnológico). Tercero, incluir desde el principio un plan de datos que aborde interoperabilidad, gobernanza y cumplimiento normativo (protección de datos y ciberseguridad).
En términos financieros, explique claramente la estructura de cofinanciación: porcentaje solicitado, aportación propia y otras fuentes (fondos regionales, inversores privados). Para convocatorias como Red.es o CEF, adjuntar cartas de compromiso de la autoridad local y memorias técnicas del piloto acelera la evaluación. Asimismo, preparar indicadores de impacto (reducción de toneladas de CO₂, coste por viajero-km, mejora en tiempos de viaje) facilita la justificación del retorno socioeconómico.
Aprovechar los Info Days y jornadas de brokerage que organiza la Comisión Europea, los ministerios nacionales y las comunidades autónomas permite identificar socios y clarificar requisitos técnicos. Los Puntos Nacionales de Contacto (NCP) para proyectos europeos ofrecen asesoramiento específico. Además, documentar desde fases tempranas la replicabilidad y el plan de negocio para la post-demostración (mantenimiento, modelo de ingresos) mejora la viabilidad percibida por evaluadores e inversores.
Además, SACSIS cuenta con amplia experiencia en la preparación y elaboración de proyectos de ciudades inteligentes y movilidad sostenible. Contáctanos y te apoyamos en tu desarrollo.
Sociedad para el Avance Cientifico, Society for the Improvement of Science.
Edificio Agora,
Avda. Via Apia, 7
Planta 6, Oficina 9
41016 – Sevilla
Tlf: +34 955 985 250
La Unión Europea ha colocado la inteligencia artificial generativa […]
Entre 2025 y 2027, la Unión Europea ha configurado un marco […]
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies
ACEPTAR